Sat García Quintana, Valboa

Herd Management Software Spain

Valboa (Trabada, Lugo), España

190 vacas en ordeño

UNIFORM-Repro Profesional con integración a T4C de Lely

Sat García Quintana, cómo la digitalización cambió el trabajo en la granja
Esta ganadería de la Mariña lucense, gestionada por tres familias socias, experimentó un cambio radical en el manejo de su rebaño con la introducción del programa UNIFORM-Repro y de dos robots de ordeño.

“Si nos dicen hace unos años que vamos a tener el control del ganado que logramos hoy en día con la digitalización, no lo creemos. Es algo exagerado”, resume Paco Oliveros, uno de los socios de Sat García Quintana. La ganadería, ubicada en Valboa (Trabada, Lugo) afrontó desde hace ocho meses un cambio sustancial, con la incorporación de dos robots de ordeño y del programa UNIFORM-Repro, con el que pasó a gestionar a diario el trabajo en la granja y el control de los animales.

Hablamos con Paco Oliveros y con José Oliveros, que junto con sus respectivas mujeres, Natalia Yañez y María Orozo, se encargan de la gestión de los 190 animales en ordeño de la Sat García Quintana, así como de las vacas secas. La otra pareja socia de la Sat, Antonio García y Berta Quintana, se ocupa de toda la recría de los animales de la granja. La ganadería tiene en la actualidad unas 120 vacas en el robot y sigue ordeñando en sala otras 70, un trabajo del que se ocupan Natalia y María.

¿Cómo fue la introducción de los robots y del programa UNIFORM-Repro?
Paco: Estamos todos en fase de adaptación. El primer robot Lely lo pusimos hace 8 meses y con el programa UNIFORM-Repro comenzamos a trabajar un mes después, ya conectado con el robot. Para nosotros todo el tema digital fue novedad y estamos aún aprendiendo, pero a día de hoy, si nos quitasen toda la información que tenemos en el programa y tuviéramos que volver a la situación anterior, sería un problema.

Muchas veces hablamos del ordeño en el robot, que es importante y lo hace bien, pero lo que más notamos en la granja fueron los datos que tenemos ahora porque no estábamos en eso.

José: Nosotros hacíamos todo a ojo y no era lo mismo. Tenemos un establo muy abierto, donde ves bien a los animales, pero hay muchas horas al día que no estás aquí y es imposible que te des cuenta de todo. Estábamos además sincronizando celos, que era un gasto importante, y hoy en día no es necesario. Las ventajas del manejo de la granja con el programa son exageradas. Te facilita mucho la detección de celos y problemas. Al final del año, son muchas las vacas en las que mejoras el manejo gracias a la información que recibes.

¿En qué cuestiones el programa UNIFORM-Repro os ayudó a mejorar el manejo del rebaño?
Paco: Las principales cuestiones que miramos en el programa son son integradas de los datos de los robots, como la actividad, para la detección de celos, y la rumia. También la temperatura de la leche porque te permite detectar cuando alguna vaca va a tener algún problema. Los informes que te aporta el programa facilitan mucho el manejo de los animales. Si por ejemplo vas al informe de salud y ves que alguna vaca bajó la rumia y que tiene menos actividad, sabes que hay un problema con ese animal, probablemente que esté cojo.

José: Yo comparo el programa con la prevención que tenemos en el establo en cuanto a manejo, de tener las vacas bien, con buenas camas, higiene, agua, etc. El programa es otra parte que puede ayudar mucho a la mejora del manejo de los animales.

¿Cómo hacéis ahora la organización del trabajo con el programa?
Paco: Tú llegas por la mañana y tienes en la pantalla principal del programa los partos que vas a tener, los secados que vas a tener y los celos que hubo de noche. Son las cosas que más usamos en el día a día y después, cuando tienes tiempo, es ver datos y datos. Se te pueden pasar perfectamente un par de horas mirando datos y ni te das cuenta.

El programa también tiene una funcionalidad de lista de tareas, que es útil, por ejemplo, cuando tienes que aplicar tratamientos porque te salta la alerta de esa tarea, pero como no estamos tratando casi nada, pues es algo que no utilizamos.

Jose: A mí si me dicen hace años que ordeñamos 190 vacas y que no tiramos un litro de leche, diría que es imposible. Para conseguir eso tienes que estar atento a muchas cosas, tener un buen mantenimiento de todas las instalaciones y los cubículos llenos de arena.

Es más un tema de prevención que de trabajo porque a decir verdad, yo ando unos 15 kilómetros al día, por lo que dice una aplicación del móvil, pero no cojo un peso. Haces todo con maquinaria y el programa es un elemento más que te ayuda a controlar mejor la granja. Llegas y controlas cómo está todo. Una ganadería de leche mueve muchos volúmenes, pero en el poco es donde vas a notar la diferencia. Tener cuidado de las cosas es la base de todo.

¿Utilizáis el programa en el ordenador o en la aplicación del teléfono móvil?
Paco: Casi todo en el móvil porque es muy cómodo. Estás en el patio y puedes ir metiendo los datos directamente con la aplicación, a medida que vas haciendo todo el trabajo diario de secados, inseminaciones y partos. Lo único que hago en el ordenador son las cuestiones de clínica veterinaria y las bajas de animales que salen de la granja, porque normalmente metes más datos. Con el programa trabajé yo sobre todo, hasta el momento, pero Pepe también va cogiéndole el truco.

José: Estoy comenzando con él. A la gente mayor nos cuesta más la informática, pero esto es el futuro, no hay vuelta que darle. Quien quiera seguir en esto, a partir de 30 vacas debería estar informatizado.

En vuestro caso, ¿cómo os decidisteis a implantar el programa?
Paco: El que nos impulsó a introducirlo fue nuestro veterinario de Serivet, Juanjo. Nosotros, al principio, acabábamos de poner el robot y ya teníamos bastante con adaptarnos a él, pero nos decidimos y la verdad es que bien. En el programa tienes todo lo que pasa en la granja. Puedes comparar todo, desde fertilidad de un toro, datos de partos, de producción… Te facilita tomar decisiones. Voy a poner este toro u otro. Esta vaca, que pensabas que era buena, miras los datos de producción e igual te das cuenta de que no era lo que pensabas. Te permite tomar decisiones más rápido, anticipas las decisiones.

¿Cómo definiríais en pocas palabras las ventajas del programa?
Paco: Es útil, facilita mucho el trabajo y es rentable.

Tierra y mano de obra profesional, principales necesidades para el sector en la comarca
Las ganaderías de Paco y José se asociaron en una Sat hace unos 16 años como vía para mejorar la calidad de vida. Hace cinco años se unieron con otra granja con la misma idea de ganar en futuro y de repartir mejor el trabajo. La Sat García Quintana cuenta ahora con seis personas en el trabajo diario: Antonio y Berta, que se ocupan de la recría; María y Natalia, que se encargan del ordeño de las vacas que están en la sala; Paco, que lleva el trabajo de las tierras; y Pepe, que se encarga del mantenimiento diario de la granja.

Es un sistema que les permite librar un fin de semana cada dos, tener más tiempo para el control del ganado e incluso para asumir parte de las obras que hay que hacer periódicamente en la granja

Base territorial
La granja maneja una superficie de algo más de 60 hectáreas, de las que la gran mayoría, unas 55 hectáreas, están a rotación de maíz y raigrás. “Tenemos que hacer un trabajo muy intensivo de la tierra porque hay poca superficie en la zona” -explica Paco Oliveros-. “Para estar bien en base territorial, en nuestro caso necesitaríamos otras 15 o 20 hectáreas. En la situación actual, tenemos que comprar cada año alrededor de 400-500 toneladas de maíz, y también adquirimos alfalfa y algo de paja”

“En nuestra zona lo que falta es superficie y superficie cómoda para trabajar, porque hay fincas pequeñas y con desniveles grandes. Es el problema que tenemos” -señala José Oliveros-. “Puede haber fincas disponibles pero que están lejos, por lo que tienes que descartarlas. Las fincas tienen que estar cerca del establo porque al año, entre otros trabajos, mueves muchos metros cúbicos de purín, que tienes que aplicar y tapar”.

“Antes no te dabas cuenta de que si tienes una finca lejos, no te compensa el tiempo que pasas en viajes en el tractor hasta ella” -completa Paco-. “Lo más lejos que estamos cogiendo fincas es a 3 kilómetros. Nos ofrecieron varias a 7-8 kilómetros, pero para coger una finca a esa distancia, tiene que ser muy buena de terreno, grande y con accesos fáciles”.

Todo el trabajo de las campañas agrícolas, salvo la cosecha del maíz, lo hace la propia granja. Es una decisión que tomaron por la falta de mano de obra profesional en la comarca. Existe la posibilidad de trabajar con empresas de servicios, pero para optimizar los rendimientos, prefieren encargarse ellos del trabajo. “Entre sembrar el maíz un mes antes o después, puede haber una diferencia de rendimiento de 15.000 kilos por hectárea. Cuando hay campaña, hay que echar horas”, concluyen.

Producción
La ganadería comercializa alrededor de 7.400 litros de leche al día, de los que una parte van para Central Lechera Asturiana, de la que es socia una de las granjas originales de la Sat, y otra parte para Inleit, la firma que está montando la planta de Curtis, que por el momento envía la leche a su factoría de Guadalajara.

El promedio de producción de la ganadería ronda los 42 litros por vaca. Los animales están divididos en tres lotes, uno de alta producción en robot, con un promedio de tres ordeños al día y 48-50 litros de producción; otro lote en robot de vacas de primera lactación, con una producción de unos 38 litros de promedio, y un tercer lote en sala que se ordeña dos veces al día.

Genética
En calidades, la granja ronda los ,3,30 de proteína, 3,75 de grasa y menos de 100.000 células somáticas. “A la hora de inseminar las vacas, miramos que los toros sean positivos en grasa y proteína, pero no son aspectos en los que nos estemos centrando. Lo que más miramos en la genética son las ubres bien colocadas y la velocidad de ordeño. Cuando visitas granjas con robots, te das cuenta de que hay vacas que echan el doble de tiempo que otras en el robot, así que es un tema importante para nosotros”, valora Paco.

La ganadería está también seleccionando toros A2A2, pues entiende que es una leche con perspectivas de mercado en el futuro.

Este testimonio ha sido publicado en la revista online Campo Galego en julio de 2019